PENTATÓNICA MENOR MAJ7
Una parte muy importante de aprender música tiene que ver con establecer vínculos y hacer asociaciones. La idea fundamental es siempre entender cada concepto para poder extrapolarlo, modificarlo y desarrollarlo, no simplemente memorizar datos de manera aislada. De ese modo, cada paso adelante implica una visión más amplia y conectada de la realidad musical.
Tomando esta premisa como punto de partida, he seleccionado la que posiblemente sea la escala más conocida y usada en la música moderna en general: la escala pentatónica menor (1 b3 4 5 b7)
Un cambio, aparentemente pequeño, como subir un semitono la séptima va a abrir numerosas puertas a otras dimensiones musicales.
La nueva fórmula es 1 b3 4 5 7, por tanto tiene sentido denominar a la nueva escala Pentatónica menor maj7.
Partiendo de las clásicas cinco digitaciones de la pentatónica menor, en el tono de Do, la nueva escala se vería así:
En este punto no se trata de recorrerla ascendente y descendentemente hasta recordarla. Para desarrollar memoria fotográfica, hay que poner atención en identificar donde han sucedido los cambios con respecto a la pentatónica menor. No solo es el procedimiento más lógico, si no el más rápido.
Date el tiempo necesario para grabar esta nueva información en tu cabeza, en tus manos y sobre todo deja que tu oído se impregne de su sonoridad. Experimenta con diferentes técnicas, ritmos. Juega, en definitiva con ella y fantasea con sus posibilidades.
A partir de aquí viene la parte de aplicación práctica, que inevitablemente va ligada a la comprensión teórica. La clave en este caso es observar como un conjunto pequeño (de 5 sonidos) puede encajar en otro más grande ya conocido, como otras escalas de 7 notas.
Las escalas que llaman la atención por contener tercera menor y séptima menor son la menor armónica (1 2 b3 4 5 b6 7) y la menor melódica (1 2 b3 4 5 6 7). Por pura coincidencia numérica (interválica en realidad) la pentatónica menor maj7 va a funcionar en todas las situaciones donde lo hagan estas dos escalas. Observa la comparación. Los intervalos en color azul están presentes en todas las opciones, y los que están en negro son las notas que faltan y varían en cada escala:
Tiene sentido en este punto, resaltar que si no conoces o usas estas dos escalas, quizá no tenga tanto sentido hacer esta exploración ahora mismo. Estudiar bien implica seleccionar el material con sentido común. Confío en que lo harás.
Por supuesto, las implicaciones de este cambio son incluso mayores, puesto que tanto menor armónica como menor melódica derivan cada una siete modos, algunos de ellos ampliamente usados. Eso implica que los cinco sonidos de la nueva escala, pueden ser de hecho diferentes intervalos. Depende donde establezcas la tónica de referencia.
Un punto de partida en esta idea puede ser mover la fundamental de la pentatónica menor maj7 a las otras cuatro notas que la componen. Es decir, derivar sus modos. A continuación digitados con la tónica en la sexta cuerda:
De igual manera, es posible establecer conexiones entre estos nuevos modos, y los modos generados por menor armónica y menor melódica. Esta tabla establece algunas comparaciones, utilizando el código de color anteriormente mencionado:
Como siempre indico, mis lecciones son más exploraciones que métodos que seguir al pie de la letra. De manera objetiva, subiendo un semitono a una nota de una escala, es posible acceder a estas 8 sonoridades únicas y utilizarlas en contextos familiares. Ya lo habrás adivinado, esta es la punta del iceberg. Siempre hay más por descubrir, aprender y experimentar. Pero no dejes que la cantidad te abrume. Concentrate en la calidad y en el uso real. Mejor tomar un solo dibujo y tratar de entender y utilizar para improvisar o componer una melodía. La teoría siempre ha de ir acompañada de un porcentaje mucho mayor de práctica. Así funciona. Mientras tanto, permanece motivado y disfruta de cada paso. Buena suerte.
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